[ apuntes ocasionales ]

El 2010 tuvimos el placer de escuchar el nuevo material de estudio de la mezzo italiana Cecilia Bartoli: Sacrificium , donde es acompañada por Il Giardino Armonico (disco que obtuvo un grammy en febrero pasado). Lo que pretende Bartoli con este material es acercarnos al mundo de los castrati, aquellos jóvenes prepúberes que en el siglo XVIII, y en pro de la lírica, eran convertidos en eunucos para que su hermosa voz infantil no se deformara con el inevitable proceso de crecimiento. En aquellos años, los más famosos compositores  se dedicaban de manera casi exclusiva a componer partituras para que estos jóvenes, cuyas voces alcanzaban registros nunca oídos hasta el momento, lucieran sus angelicales voces. Y es así como en “Sacrificium”  Bartoli rescata del olvido y presta su voz a las diferentes piezas que hicieron celebres a artistas como Farinelli o Caffarelli, dos de los más célebres y recordados castrati y que en el Ottocente eran verdaderas estrellas. Y así Bartoli recupera tod

En este disco nos encontramos con una colección de obras poco conocidas de la familia Bach -J ohann Sebastian, Carl Philipp Emanuel y Johann Christoph - además de una transcripción hecha por J. S. Bach basada en una cantata del compositor italiano Francesco Conti .   Como lo sugiere el titulo, estas piezas se mueven con el tema de la pena, del dolor; de hecho lo primero que escuchamos es “Ach, dass ich Wassers g'nug hätte” -de J.C. Bach-, que es una súplica por parte de la voz solista para tener las suficientes lágrimas y así lograr  que sus pecados sean perdonados. Y Kozená interpreta con tanta pena contenida que resulta inolvidable. En cada obra ella canta con un impecable legato, un tono que siempre encuentra la dinámica natural de cada palabra, y en cada una de las obras que componen el disco. En “Languet anima mea” , (la trascripción sobre una obra de Conti, para voz, 2 oboes y cuerdas), termina con un “Alleluja” de 90 segundos en donde la voz fluye llena de coloratura y n

Opera en 3 actos compuesta por Vivaldi y estrenada en el teatro de San Angelo en Venecia hacia 1720. La trama se ambienta en ese Oriente que para la época sonaba a algo lejano, exótico y mágico, dentro de la confrontación entre dos reinos mediante el matrimonio de sus herederos (Rosane y Melindo) esto tendría fin. Todo se complica al descubrirse que Melindo no es sino el hijo ilegitimo del sultán Mamud con su favorita Damira, y no de la reina Rustena, cuyo verdadero hijo es el postergado Zelim.   Ante ese argumento, nos encontramos con una obra que destila belleza y originalidad, una obra técnicamente imaginativa, al igual que en sus armonías y orquestación. Tiene una estructura que se caracteriza por muy pocos números en conjunto (un trío, un quinteto y un coro) y es una serie de recitativos y arias da capo que, dentro de un género que corre entre la comedia y la tragedia, los que se insertan dentro de un lenguaje maduro y fluido con una refinada instrumentación.   La grabación rec

Sucede que me canso de ser hombre. Sucede que entro en las sastrerías y en los cines marchito, impenetrable, como un cisne de fieltro Navegando en un agua de origen y ceniza. [ Pablo Neruda ]

Hay días en que salgo a caminar sin un rumbo determinado, solo caminar, siguiendo mis pasos... simplemente camino, mirando, pero sin prestar mayor atención a mi alrededor, aunque ciertos detalles me llaman la atención... pasan las calles, pasa la gente, pasan los minutos y las horas... creo que mejor sigo mi camino, hoy es uno de esos días en que sólo quiero estar conmigo y tan solo caminar